martes, marzo 23

1976 Reloaded

Supongamos que el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial continúan, por tiempo indeterminado, sin ponerse de acuerdo en nada, empantanándose y empantanándonos a todos, y con poder bastante cada cual para volver peores a los otros dos.
¿Entonces, qué? Bueno: entonces los mejores argentinos, del modo más drástico que encuentren a mano, deberán hacerles saber a los tres poderes que la verdadera Nación es más, muchísimo más, que el agregado institucional de ellos tres. Y que la urgencia de la Argentina popular será paciente con la ineptitud de la Argentina institucional hasta que un día deje de serlo.

La Nueva Provincia